El síndic de Greuges de la Comunitat Valenciana, Ángel Luna, ha pedido al Ayuntamiento de València que adopte todas las medidas necesarias para solucionar definitivamente el problema generado al vecindario por los 40 gatos que viven en uno de los pisos de un edificio de la ciudad. Asimismo, le recuerda la obligación de resolver la denuncia presentada por la representante de la comunidad de propietarios, detallándole los pasos que puede seguir si no estuviera de acuerdo con la misma.
La actuación del defensor valenciano vino motivada por la queja de esta vecina que denunciaba la situación «insostenible» de insalubridad que venían soportando los inquilinos de este edificio desde hacía más de dos años por el gran número de felinos instalados en el cuarto piso del mismo.
En la resolución, Luna recuerda que los poderes públicos deben garantizar los derechos de los vecinos afectados a la salud y al disfrute de un medio ambiente adecuado. En este sentido, insiste que es una competencia propia de los municipios la protección de salubridad pública y del medio ambiente urbano.