El Síndic considera inadmisible que el 35% de las denuncias más graves de locales de ocio hayan prescrito durante los últimos tres años

El síndic de greuges de la Comunitat Valenciana, José Cholbi, acaba de hacer pública la resolución de una investigación de oficio sobre contaminación acústica en la ciudad de Valencia. En ella analiza de forma pormenorizada los principales problemas de esta ciudad en relación con el botellón, el ocio nocturno o la colocación de terrazas (mesas y sillas) en la vía pública.

PRESCRIPCIÓN DE INFRACCIONES GRAVES Y MUY GRAVES

De la investigación llevada a cabo por el Síndic se desprende que entre un 30 y 40% de las infracciones graves o muy graves de locales de ocio en Valencia prescriben o han prescrito durante los últimos tres años. De acuerdo con la legislación vigente, sería la Agencia de Seguridad y Respuesta a las Emergencias de la Generalitat la competente para sancionar este tipo de infracción (grave o muy grave). Sin embargo, la falta de medios autonómicos para tramitar los expedientes no solo de Valencia sino de toda la Comunitat Valenciana está provocando la prescripción de un alto porcentaje de infracciones.

Para el Síndic se genera una situación de impunidad injustificable  que agrava todavía más la contaminación acústica existente. “El infractor no tiene interés en cumplir la ley porque, sencillamente, no pasa nada” asegura Cholbi, a la vez que recuerda la reciente sentencia dictada por el Tribunal de Estrasburgo (de 16 de enero de 2018) que advierte que las leyes para proteger los derechos garantizados no sirven de nada si no se aplican correctamente, al igual que un sistema sancionador no es suficiente si no se aplica en tiempo y de manera eficaz.

A fin de enmendar esta situación y evitar que sigan prescribiendo estas infracciones graves o muy graves, el Síndic propone dos soluciones: o bien atribuir la competencia sancionadora a los ayuntamientos, tal y como viene reclamando el propio Ayuntamiento de Valencia desde hace años (una medida que podría ser viable al menos en los municipios de gran población); o bien incrementar notablemente los medios económicos, técnicos y personales de la Administración autonómica para poder llevar a cabo esta labor de forma eficaz.

TERRAZAS E INEFICACIA DE LAS MEDIDAS EN ZONAS ACÚSTICAMENTE SATURADAS (ZAS)

La proliferación de mesas y sillas en la vía pública es tan elevada que los vecinos no solo se quejan de las molestias acústicas que generan las terrazas hasta altas horas de la madrugada, sino que hay zonas donde apenas se puede transitar por la calles. Son habituales los incumplimientos consistentes colocar mesas y sillas sin autorización o sin respetar el número máximo de las permitidas. El ruido ambiental que se genera con la acumulación de muchas terrazas en una misma zona multiplica exponencialmente las molestias acústicas.

Por ello, el síndic también ha pedido al Ayuntamiento de Valencia que incremente el control y la vigilancia sobre las terrazas, para que estas cumplan con las  licencias concedidas. Igualmente, considera adecuado dejar de conceder nuevas autorizaciones o ampliación de las otorgadas en aquellas zonas donde exista saturación acústica.

Precisamente sobre las Zonas Acústicamente Saturadas (ZAS), el Ayuntamiento de Valencia comunicó al Síndic que en los últimos años se han declarado tres zonas ZAS y otra cuarta está en camino. Sin embargo, los hechos demuestran que las medidas adoptadas en estas zonas no están funcionando correctamente, ya que los vecinos siguen sin poder ejercer su derecho al descanso nocturno. Razón por la cual el Síndic insta a adoptar medidas más eficaces en todas los ZAS, así como en las zonas que en la actualidad se encuentran en tramitación.

FALTA DE INFORMACIÓN SOBRE NÚMERO DE LICENCIAS Y PERMISOS CONCEDIDOS

Los vecinos afectados también se quejan de la falta de información municipal en relación con los datos sobre terrazas y establecimientos autorizados, es decir, quieren saber cuántas terrazas hay legales y si están cumpliendo con las condiciones de las licencias. Sobre este problema que también afecta a diversos barrios de la ciudad, el Síndic recomienda tanto al Ayuntamiento de Valencia como a la Agencia de Seguridad y Respuesta a las Emergencias de la Generalitat que constituya un Observatorio del Ruido en el que participen  técnicos municipales y autonómicos, representantes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, y los representantes de las asociaciones vecinales y de hostelería en las zonas afectadas para que intercambien información actualizada sobre la situación real existente en cada zona y las medidas necesarias a adoptar en cada momento.

INCREMENTO DEL CONSUMO DE ALCOHOL EN VÍA PÚBLICA

Otro de los problemas que aborda el Síndic en su resolución es el aumento de la práctica del botellón. El consumo de alcohol en la vía pública sigue creciendo de forma alarmante, especialmente, entre los más jóvenes. Un problema que preocupa a esta institución no sólo por las molestias generadas de contaminación acústica sino también por la percepción de “normalidad” de este consumo entre los jóvenes.

El aumento de sanciones impuestas no ha conseguido frenar el consumo de alcohol en la calle. De ahí que el defensor insista en la necesidad de promover campañas y programas de educación, sensibilización y prevención del consumo del alcohol dirigidos especialmente a los adolescentes y jóvenes.  Hay que seguir insistiendo en la concienciación sobre los riesgos y efectos negativos para la salud que supone el consumo del alcohol.

 

Consulta la resolución del Síndic sobre este asunto:

http://www.elsindic.com/Resoluciones/10910822.pdf